1 de mayo de 2009
El ingeniero Ramón Alburquerque calificó como un crimen contra el ecosistema la instalación de una fábrica de cemento en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional de los Haitises y dijo que Los Haitises no pueden pasar a manos privadas por ser un área protegida y constituir un conjunto natural esencial para la sostenibilidad ambiental del país.
El presidente del Partido Revolucionario Dominicano calificó como una aberración el intento de instalar una fábrica de cemento en lo que definió como “un santuario digno de preservación por su contenido de riqueza en biodiversidad, como fuente de aguas puras y como pulmón de la patria”.
Advirtió que la cementera afectaría sensiblemente los vientos alisios que cruzan Los Haitises cargados de agua para precipitarse sobre gran parte del Este y del Cibao y se preguntó quien asumiría la responsabilidad de ese crimen de lesa humanidad.
Alburquerque respaldó los movimientos sociales de rechazo que se han originado en las comunidades de Monte Plata en contra de la instalación de la fábrica de cemento que cuenta con la no objeción de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Este jueves se produjo una marcha en el municipio de Gonzalo para protestar por el proyecto industrial en la zona de amortiguamiento de Los Haitises.
El ex senador de la provincia de Monte Plata recordó que durante muchos años las autoridades han impedido que los campesinos de la zona cultiven terrenos de su propiedad en la misma zona de amortiguamiento, por lo que consideró injustificable que se permita una actividad que tendría un mayor poder de contaminación en perjuicio del parque nacional.
El área de Los Haitises fue declarada Parque Nacional en 1974 por sus características únicas en el planeta, con una extensión de 1600 kilómetros, 204 kilómetros cuadrados como corazón del parque y 1400 kilómetros de franja de amortiguamiento o de transición, ambas sujetas a regulaciones por las leyes ambientales.
Se refirió a una supuesta declaración del Secretario de Estado de Medio Ambiente y Recursos Naturales, doctor Jaime David Fernández Mirabal, quien había expresado que dicho proyecto es asunto de estado. ¿Será cuestión de estado que un grupo económico amigo del gobierno, se apropie de cien mil tareas que luego valdrían miles de millones de pesos?, preguntó a renglón seguido el técnico y dirigente político.
Dijo que si en la zona no se acepta la actividad agrícola de los campesinos tampoco se debe permitir la operación de una planta industrial con alto poder de contaminación.
“Hay que parar esta cementera hija de mentes devoradoras que buscar adueñarse del país sin reparar en los daños irreparables que causen sobre la ecología y el medio ambiente”, subrayó el ingeniero Ramón Alburquerque.
1 comentario:
Me llena de alegria el ver que Alburquerque se haya expresado en este sentido ya que el crear una cementera en esta comunidad es la idea mas descabellada que mente humana pudiera crear. Y si bien es cierto que la comunidad de Sabana Grande de Boya y zonas aledanas necesita fuentes de trabajo el traerle al Lobo feroz disfrado de Caperucita Roja no va a ser la solucion que nuestra comunidad necesita porque el dano tan grande que se le va a ser a todo este hermoso projecto de los haitises no se va a poder devolver ni con todo el dinero del mundo. Digamosle no a este vil projecto porque si nos unimos a una sola voz podemos salvar nuestra pobre pero rica a la misma vez comunidad.
Publicar un comentario