Cree con presidencia PRD, MVM recibió regalo envenenado

6 de julio de 2009 www.elnuevodiario.com.do

Grabar artículo Imprimir artículo Escribir comentario Enviar a un amigo Tamaño del Texto - Pequeño - Normal - Grande - Muy Grande - Extra Grande - El presidente del Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), Hatuey De Camps, consideró que al aceptar la presidencia del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) sin acudir a una convención, Miguel Vargas Maldonado recibió un “regalo envenenado”. Entiende que Vargas Maldonado cometió un error al concertar con el Proyecto Presidencial Hipólito (PPH), resaltando que el ex candidato presidencial había llegado a conseguir una cantidad de adherentes de la estructura de poder interno del PRD-PPH, que le permitía manifestarse, logrando una sanción como presidente en una votación, sin que ahora tenga que escuchar a Mejía y a su vocero, Héctor Guzmán, diciendo que es una presidencia cuestionable. “En esa dirección, obviamente, le seguirán haciendo la vida imposible al ingeniero Miguel Vargas cuando él pudo haber resuelto eso, claro, cada quien tiene su librito, él te va a decir a ti ´no, pero es que estaba obstruida el asunto de la comisión y yo necesitan llegar, ese fue un regalo envenenado el que le dieron”, afirmó. Entrevistado en el programa Bulevar, que se transmite por CDN2, De Camps aseguró también que Mejía y el PPH mantiene el control de la organización opositora. En otro orden, reiteró que nadie lo sacó del PRD-PPH, sino que se fue y formó un partido político por sentirse asqueado y hastiado ante la corruptela auspiciada por Hipólito Mejía y la doblez asumida por una serie de dirigentes, entre ellos Miguel Vargas Maldonado. Dijo que el presidente del PRD se sumó al proceso reeleccionista por “defender el cargo, y no por disciplina partidaria. “Lo que pasa es que la posición de ser secretario de Estado era de cierto modo satisfactorio, y él (Miguel Vargas) quería defenderlo y ya había pasado por un trauma donde había sido quitado de una posición donde lo hizo bien”, dijo. Indicó que tras su renuncia, Mejía designó una Junta Central Electoral complaciente, donde sus tesoreros y demás eran parte del tribunal. “Es decir, los tesoreros de él (de Mejía) en campaña, los convirtió en miembros de la Junta, el juez que dictó en el caso de Moca una sentencia determinada, lo llevó a la Junta como premio”.